Desafiando las duras condiciones de la zona intermareal, caracterizada por el constante vaivén de las olas, vive un número sorprendentemente elevado de organismos.

La zona intermareal se caracteriza por el hecho de ser la zona de influencia de las mareas, aunque en el Mediterráneo éstas son bastante reducidas (20 cm como máximo). En determinadas ocasiones y por razones de la dinámica marina (olas, generalmente), estas zonas quedan momentáneamente sin agua. Los invertebrados que las habitan se han adaptado a esta situación, y son capaces de guardar agua dentro de su cuerpo, y así sobrevivir hasta que vuelven a tener contacto con el mar. En cambio, los peces se ven obligados a desplazarse periódicamente con el vaivén de las olas. Por otro lado, las zonas batidas presentan una riqueza de especies baja frente aquéllas calmadas donde la estabilidad de las aguas permite el desarrollo de muchas más especies.

Dorada (Sparus aurata)

Tomate de mar (Actinia equina)

Otros organismos marinos frecuentes en esta comunidad:

• Anémona común (Anemonia sulcata)  
• Castañuela (Chromis chromis) 
• Salema (Sarpa salpa) 
• Sargo breado (Diplodus cervinus)